Saigón

Aunque oficialmente se llama Ho Chi Minh, a nosotros, y creemos que también a los vietnamitas, nos gusta más llamarla Saigón.

Tienen habilitado un barrio entero para los turistas bajo un concepto muy parecido al de Bangkok (Kao San Road). Cientos de hoteles, gesthouses, pensiones, restaurantes, agencias de viajes y tiendas se apelotonan en dos o tres manzanas, incluso los autobuses te dejan allí mismo. Eso sí, muy cerquita de los más importantes puntos de interés de la ciudad. Si vas de mochilero independiente, lo tienes crudo, todo te lo organizan: viajes, excursiones, desplazamientos… Es muy difícil moverse totalmente por libre, aun así, vamos avanzando.

Al contrario de lo que pensábamos hemos podido visitar la ciudad a patita, resguardándonos del calor de vez en cuando, ya que por momentos era insufrible.

El distrito 1 tiene un gran parque con jardines y glorietas que da cobijo a mucha gente mientras hacen actividades varias; baile, gimnasia, juegos, descanso, acaba en la plaza del Ben Thanh Market con su gran estatua en el centro.

Seguimos caminando y nos encontramos con uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad; la sede del comité del pueblo.

Los principales museos y cadenas hoteleras son dueños de la mayoría de los edificios de estilo colonial, algunos recuerdan a los edificios de la Gran Vía de Madrid.

Otra curiosidad es la pequeña réplica de la Catedral de Notre Dame, pero con una diferencia, no tiene vidrieras de colores. Está ubicada en mitad de una plaza y con la estatua de la Virgen María, lamentablemente no la pudimos ver, pues está abierta al público sólo los domingos.

Frente a ella el edificio de correos, con grandes techos abovedados.

La misma calle abajo, la Opera House. Un edificio pequeño pero muy coqueto.

Durante todo el paseo pudimos ver gran cantidad de propaganda comunista, está por todas partes.

Es asombroso la cantidad de iglesias católicas que se reparten por todo el país, a pesar de ser un país comunista veneran a la Virgen María más que en países latinos.

Para no despistarnos, tomamos de referencia el edificio más alto de la ciudad, el Skydeck, de 260m. de altura.

Se trata de una ciudad de más de siete millones de habitantes y más de un millón y medio de motocicletas…

Cruzar las calles es un deporte de riesgo. Cuando esperábamos el semáforo parecía que estábamos en la parrilla de salida de Moto2.

No sé como lo hacen, pero siempre te esquivan, lo mejor es cruzar y mirar de frente. Carlos… ¿Decías que en Hanoi hay más? No me lo imagino…

Como broche final, una pequeña muestra de las últimas tendencias de pijaming vietnamita.